A menos de 20 minutos en coche de TÓTEM Madrid, te revelamos la historia del hipódromo de la Zarzuela, un hito arquitectónico que este año celebra su 80 aniversario.
Inaugurado en 1941, el hipódromo supuso uno de los acontecimientos más relevantes de la época, convirtiéndose durante las siguientes décadas en el punto de encuentro para la aristocracia y la clase alta madrileña, desde grandes empresarios a altas jerarquías del ejército, diplomáticos, poetas, escritores y artistas.
Como ya era tradición en aquella época, cada domingo las clases más pudientes acudían al hipódromo de la Zarzuela con sus mejores galas para ver las carreras y disfrutar de un aperitivo en un ambiente exclusivo y distinguido. Su buen nombre llego incluso a oídos de millonarios internacionales, que visitaban las instalaciones para poner sus ojos en los caballos purasangre ingleses criados en España.
El evento más destacado se produjo en 1956 con un lleno histórico gracias a la visita del coronel Peter Townsend, un héroe de la Segunda Guerra Mundial que, además, en ese momento era el pretendiente de la princesa Margarita, hermana de la reina Isabel II.
Desde entonces, muchas son las vivencias que han tenido lugar en la historia de la Zarzuela: el paso de innumerables jinetes de renombre y grandes leyendas de cuatro patas (como Bannaby, Entre Copas, Noozhoh Canarias o Abrantes), la modernización del centro y hasta un cierre temporal que le permitió resurgir renovado.
Así hasta día de hoy, donde el hipódromo de la Zarzuela continúa atrayendo a los amantes de la hípica con un completo programa de carreras en sus pistas de hierba y fibra, con una magia especial donde pasado y presente conviven entre las paredes de este espectacular proyecto arquitectónico, declarado Bien de Interés Cultural en 2009.
Si deseas hacer una visita al hipódromo y vivir la emoción de las carreras de caballos, consulta el calendario para este 2021: